Confort, productividad y también una estética que acompañe el diseño corporativo de la empresa.
Una empresa supone mucho más que un logo o un eslogan recurrente: una empresa son también sus clientes, así como sus trabajadores. Y es por este mismo motivo que todos los pasos que puedan darse en beneficio de la imagen corporativa de la misma, son siempre bien recibidos tanto por el propio empresario como por el resto de la plantilla, e inclusive por parte de proveedores u otras entidades con las que se trabajen o se tenga pensado realizar acuerdos en un futuro. Y es que en el mundo empresarial, la imagen lo supone prácticamente todo: inclusive los expertos llegan a enunciar que supone un 50% en la venta o captación de clientes.
Por eso debemos de tener muy en cuenta cómo poder potenciar dicha imagen corporativa, siendo el mobiliario de oficina perfecto para su implementación, sobre todo de cara al aspecto interno de la empresa. Y es que este, al margen de ofrecernos comodidad y eficiencia en el desarrollo de los distintos puestos laborales de la compañía, también puede llegar a ser crucial en otras competencias como la del diseño corporativo gracias a su gran personalización. A continuación te mostramos cómo:
Debemos seleccionar con cuidado el tipo de mobiliario a incorporar en una oficina
Al recrear un lugar de trabajo basado en los colores y formas de la empresa se genera un ambiente de trabajo totalmente personalizado, muy distinto a los estándares neutros de otras oficinas coloquiales. Esto, mentalmente, incide positivamente tanto en los trabajadores que habitualmente desempeñan sus funciones en los puestos de trabajo que se llevan a cabo en dicha oficina en concreto, como en los clientes que acuden a ella para cualquier consulta, la contratación o compra de productos y servicios, la firma de acuerdos legales, etc.
- No solamente ofrece una sensación de mayor seriedad y profesionalismo, sino que engrandece el nombre de la marca.
- Incita a los trabajadores a ser más participativos, desarrollar sus funciones laborales con mayor rapidez y lo que es mejor de todo: de forma mucho más eficaz también, por lo queaumenta la productividad.
Esto es debido a que el personal se sentirá mucho más identificado con la empresa, sintiéndose parte de la misma y trabajando todos en un mismo objetivo con la motivación extra que ello implica: ayudar a que crezca.
- De fuera hacia adentro, la percepción que ofrece es también mucho más firme y segura, denotando en que cuidan los detalles al máximo tanto en su trabajo como con el resto de cosas que lleven su marca, ya que para ellos es importante.
Por supuesto, a la hora de comprar muebles para oficina no solo es importante crear un diseño que en conjunto favorezca la imagen corporativa de la misma. No debemos de obviar que son elementos de trabajo creados con la finalidad de facilitarles las cosas a los trabajadores durante su jornada laboral, por lo que la función de confort debe de estar también siempre presente. Esto conlleva desde comprar las mejores sillas y sillones de oficina (aquellos más cómodos, al menos), reposapiés, reposamanos acolchados, etc. Hasta la creación de espacios de acuerdo con el amueblado estrictamente necesario para el mismo. Te ejemplificamos ambos casos:
Por ejemplo, en un elemento tan simple para el trabajo como son las sillas de oficina, o los sillones para los despachos, etc. Debemos de asegurarnos que se haga inciso en la implementación de elementos que permitan:
- Una correcta regulación tanto de la altura de la silla en sí misma, como de los brazales.
- Que esta ofrezca un tejido cómodo y transpirable.
Soporte lumbar.
- Posibilidad de desplazamiento (ruedas).
- Sistema sincro a-p especialmente diseñado para sillas de oficina.
Adecuar los espacios a sus necesidades y funciones
Al comprar mobiliario de oficina, también deberemos realizar un estudio acerca de qué hace falta y dónde: y es que todos sabemos de las necesidades básicas de un despacho a nivel de mesas y sillones ejecutivos, archivadores, armarios, etc. Pero las estancias varían, y los muebles para ellas también. Por eso, a la hora de preparar una zona de recepción o una sala de espera necesitaremos comprar otro tipo de mobiliario para oficina como por ejemplo una mesa especialmente diseñada para dicha función, en el primer caso, o una bancada para el segundo.
Así no solamente facilitaremos el desarrollo laboral necesario para dichos puestos de trabajo en concreto, sino que además favoreceremos la inclusión del material necesario en cada uno de ellos.